La liberalización de horarios comerciales también ha supuesto algunos conflictos a nivel interno entre empresas y trabajadores. Sin ir más lejos, una tienda del otro comercio textil, también en la calle Santiago, ha despedido a una trabajadora que se negó a trabajar en domingos. La citada empresa envió una carta a todos sus trabajadores en la que les dice que, dada la liberalización de horarios y en base a adaptarse a la actual demanda, «es del todo necesario» que se modifique la jornada laboral para fijarla de lunes a domingo. «Se le informa de que si resultase perjudicada por la presente modificación tendrá derecho a rescindir su contrato y percibir una indemnización de 20 días de salario por año de servicio», concluye la misiva.
martes, 28 de mayo de 2013
miércoles, 1 de mayo de 2013
Paro y esclavitud, una misma causa
Suscribirse a:
Entradas (Atom)