La Merced Migraciones proviene de la Orden de La Merced, fue la primera entidad en España en acoger a niños y jóvenes refugiados que llegaban solos huyendo de la guerra y es una referencia en este ámbito de actuación.
Los jóvenes nos hablaron de su experiencia, una experiencia vital en la que han tenido que superar muchas barreras, desde sus países de origen, en el camino hacia Europa y a la llegada a España.
Ante todo, relataron cómo nadie abandona su casa y su hogar por capricho, la situación en sus países de origen es insostenible y eso les hizo buscar una salida con la que poder sobrevivir y poder ayudar a sus familias.
En el viaje, encontraron mayores o menores dificultades, cada caso es un mundo, pero recuerdan sobre todo la travesía por el desierto o el viaje en patera.
Tras esta presentación, Mónica Prieto estuvo hablando de cómo la guerra se está convirtiendo en un instrumento de crecimiento económico y las víctimas que esto genera: se hace negocio con las guerras, se hace negocio con las fronteras, se hace negocio con refugiados y migrantes,...
Las experiencias de lucha por los derechos que se han producido y se siguen produciendo en estos países empobrecidos son una esperanza y un acicate. La mera mención de Thomas Sankara hizo que los chavales relataran su experiencia respecto a esta figura, pese a ser un político de Burkina Faso, es conocido en toda África, así como otros muchos políticos que han trabajado de manera honrada por sus países. Historias que no llegan a nuestro norte enriquecido pero que son una realidad cotidiana en las vidas de los africanos. Una muestra de que es posible hacer una política que ponga en el centro a las personas, no los intereses partidistas.
La esperanza pasa por unirnos la gente del norte y del sur para luchar contra esta aberración en la familia humana.
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