En nombre de los últimos, gracias

Gracias a los que habéis decidido dar voz con vuestro voto a los últimos de esta sociedad.

Gracias también a los que habéis compartido vuestras opiniones, sugerencias y críticas con nosotros, que nos ayuda y anima a mejorar desde hoy mismo.

Y gracias a los militantes y simpatizantes, por el trabajo hecho durante estos intensos días y todos y cada uno de los días del año. Esto ha sido posible sólo gracias a vuestro  trabajo voluntario. Sin subvenciones millonarias,  sin gastar un céntimo del erario público. Financiado exclusivamente con  las cuotas de los militantes.

Gracias por vuestra ilusión, entusiasmo y esfuerzo.

Y es que cuando se pone a la persona en el centro, todo toma una nueva orientación. La economía se pone al servicio de las personas; la política, deje de ser un fin, para ser un medio que gestione las cosas comunes para el bien común. Y la defensa de la dignidad humana se traduce en una lucha por la familia, la vida, el derecho a la vivienda, la educación y el trabajo….

Por ello y para ello nació el SAIn hace más de 10 años, para hacer que la política no sea hacer posible lo posible, sino hacer posible lo necesario. Y de forma prioritaria por los más débiles, los más olvidados, los que no tienen voz. Al servicio de los últimos.

Como decía Julián Gómez del Castillo, fundador del SAIn, “Este mundo de hambrientos, de parados, de esclavos, sólo tiene remedio desde la Solidaridad”. Convencidos y animados por esta certeza, con ganas renovadas, seguiremos trabajando desde hoy mismo por un mundo mucho más justo y solidario, ¿te apuntas a esta entusiasmante tarea?